sábado, 5 de enero de 2013

Noche de caramelos (5/365)

Sábado remolón, aunque menos que otros, porque tempranito por la mañana ya teníamos a los pintores (A. y mi suegro) rematando la faena que empezaron ayer. Nosotros mientras, desayunando con calma y disfrutando de un rato de lectura / planificación / dibujo... cada uno a lo suyo.


Una pequeña siesta, un poco de galleteo (la de la foto anterior era la última, había que reponer!), y a la calle, que pasaba la Cabalgata. 

Somos un poco atípicos en esto de los Reyes Magos. Ya desde niña nuestro día de regalos era Navidad. No porque seamos fans de Papá Noel, pero era el día en que nos reuníamos la familia en casa de mi abuela y hacíamos intercambio de regalos. Además, los Reyes Magos llegaban muy tarde, y no nos daba tiempo a jugar a gusto de los juguetes antes de tener que volver a la rutina del cole. Nunca me importó, es más, cuando mis amigos presumían de regalos de Reyes, yo ya llevaba días disfrutando los míos. Y en casa de A. pasaba lo mismo, además de que pasó su infancia en diferentes países sin tradición de Reyes Magos. 

Con la llegada de nuestros hijos, la cosa siguió igual. Pasamos las navidades con mi familia en Galicia, por eso es allí donde esperamos a Papá Noel con ilusión. El año pasado incluso "le escuchamos" cuando aparcó los renos en la terraza del abuelo. Corrimos mucho para intentar verlo pero fue más rápido que nosotros. Aún así, los niños siguen contándolo una y otra vez.

Tienen claro que los Reyes Magos traen juguetes a los niños que se los han pedido, "pero como nosotros ya se los pedimos a Papá Noel y le escribimos la carta", hoy no esperan nada. Sí saben que algunos niños de su cole piden a los dos (que son muy avispados estos críos), pero también entienden que no es necesario pedir tantos juguetes y que hay niños que los necesitan más porque no tienen. Cero dramas y todos contentos. Y si encima podemos ir a ver la Cabalgata y nos lanzan unos caramelos, se van a casa más felices todavía.


la espera es lo peor... verles allí a lo lejos, avanzando taaaan lentos,
esperando con sus bolsas para recoger todos los caramelos que puedan

Mateo, a sus ocho años, me preguntaba hoy si los Reyes Magos son de verdad, porque "la mitad de los niños de mi clase dicen que son los padres, igual que el Ratoncito Pérez y Papá Noel, pero esos dos son verdad!". No sé cuanto le durará esto, pero de momento me encanta verle su carita de emoción...


Miguel quería saber cual de ellos era Baltasar, porque en Diciembre fue un Mensajero Real al cole a llevarles libros de parte de los Reyes Magos, y el suyo estaba firmado por ese Rey en concreto. 

Y David, que ya de por sí se emociona con cualquier pequeña cosa del día a día, una cabalgata llena de luces, colores, niños disfrazados, y personajes que le lanzaban caramelos, era algo que le tenía con los ojos como platos. Todo era "hala!! Mira!!", y "ooohhhh", "aaahhhhh!!"...


Feliz noche a todos los que tengáis los zapatitos puestos bajo el árbol. 

Y mañana, a por el Roscón de Reyes a casa de la abuela. :-)


5 comentarios :

  1. Que bonita la última foto, que cara de felicidad.....

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  2. JIjijijij... en tu casa exactamente igual que en la mía (pero exactamente igual, por lo tanto no tan atípica), de hecho acabas de contar mi lo que sucede en mi familia. En mi infancia Papa Noel, en la de Finn no había Reyes... todo sigue igual ♥
    Felices deseos, con o sin zapatos.

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  3. Por cierto, me encanta que Mateo aún crea en estas cosas.

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  4. wow! las caras!!! acá, cdo yo era chica la tradición de los Reyes era fuerte...pero se ha ido perdiendo. Yo lo conservo...y hago un regalo grande en Navidad y algo pequeñito en Reyes, pero acá no hay cabalgata ni nada de eso. Mi hija comprende q en Navidad puede pedir y para Reyes "lo q toca toca, es la suerte loca" puede ser desde unas golosinas hasta un muñequito pequeño o un par de globos ;-)

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  5. Hola Rebe!!, preciosas fotos!, qué caritaaas!, si es que sólo por verles tan felices... la verdad es que hoy en día están muy mal acostumbrados, tienen demasiados regalos!, mis pekes tienen Papá Noel y Reyes pero piden un par de cosas a cada uno y listo...luego al final juegan con lo más simple, si es que nos complicamos mucho...

    Me encanta la cara del pequeñín, que ilusión por favor...por cierto, la habitación de tus pekes es idéntica a la de los mios jajaja!, la misma distribución, me hizo una gracia...

    Un besote y Felices Fiestas/Reyes/Año


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