Cuando te pasas días preparando algo, y por fin llega el día y va todo bien, es como si te quitaran unos cuantos kilos de encima (lástima que solo sea "como si...", sería un maravilloso método de adelgazamiento...!!).
Después de acostarme a las tres de la mañana el viernes preparando cositas para el cumple, el sábado me hice un poco la remolona, sabiendo que me quedaban solo un par de cositas por rematar. A las cinco nos fuimos a prepararlo todo y poco después llegaron los invitados. Con las prisas y el ajetreo no los conté bien, pero eran unos dieciséis niños, más los míos y los abuelos. Este año SÍ me acordé de ir haciendo alguna foto (terroríficas y hechas a la carrera, pero las hice!!!). Así que os resumo algunas de las cositas que hicimos, porque la verdad es que no paramos!
El tema del cumple eran los dinosaurios, y hubiera querido hacer una "cueva" para hacer pinturas rupestres con los dedos.... pero acababan de pintar el local y no era plan arriesgarnos a que lo tuvieran que pintar de nuevo... Así que primer plan que tuve que borrar de mi lista de ideas. En su lugar, forré un armario que había con papel craft a modo de "cueva" y allí pegaron los dinosaurios que estuvieron pintando y recortando al llegar. Un par de mesas pequeñas, pinturas y tijeras, y allí estuvieron un buen rato con sus manualidades. Después de los dinosaurios para decorar la "cueva", algunos hicieron unas caretas (a medio pintar, porque ya tanto arte cansa!).
perfectas para mantener en el anonimato a los invitados! :-P |
De la comida ya no tuve tiempo de hacer fotos... Había, entre otras cosas, sandwiches y galletas con forma de dinosaurio (¿cómo no??), algunas decoradas con fondant (que volaron!) y otras tal cual. Y dinosaurios de juguete decorando la mesa... que acabaron por todas partes, como ya se veía venir.
Hicimos varios juegos relacionados con el tema. Los dividimos en dos equipos, poniéndoles una pegatina roja o azul en la mano. El primer juego fue "Stegosaurus". Tan sencillo como conseguir ponerles pinzas en la espalda a los del equipo contrario, a modo de las espinas de ese dinosaurio. Mientras tú intentabas ponerle pinzas a uno del otro equipo, otro te las estaba intentando poner a ti y tenías que intentar evitarlo, porque ganaba el equipo con menos pinzas en sus espaldas. Unas risas.
El segundo juego era la Caza de los Huevos de Dinosaurio: con las bolitas que hay en el interior de los Huevos Kinder, simulamos unos "huevos de dinosaurio", de diferentes colores. Primero cada equipo debía encontrar once huevos de su color. Dentro de cada huevo había una pregunta que tenían que adivinar, y si respondían correctamente se les daba una letra. Si reunían las once letras, tenían que formar con ellas el nombre de un dinosaurio. Fue muy divertido verles romperse la cabeza para acertar el orden correcto de las letras.
Y otro juego muy divertido fue el de toda la vida, de llevar un huevo con una cuchara que llevas en la boca. En este caso cambiamos el huevo por un dinosaurio de juguete. Hicieron una primera ronda en plan carrera por equipos, y fue bastante bien, así que decidimos ponérselo un poco más difícil... poniéndoles en los pies "garras de dinosaurio" (cutres donde las haya, pero sabía yo que iban a durar bien poco, así que no me esmeré demasiado... Les encantaron igualmente!). Era genial verles todos patosos intentando caminar con aquellas cajas de cereales en los pies!!
Y algunos juegos más para terminar, entre ellos una variante del clásico "ponerle la cola al burro", pero en este caso era "ponerle los dientes al T-Rex" (aunque aquello parecía más una rana que otra cosa, pero el dibujo no es lo mío!). Con los ojos vendados iban intentando acertar y poner los dientes en el lugar correcto, siguiendo las indicaciones (a gritos!!) de los compañeros.
Como se portaron fenomenal y había sido una competición muy reñida, les subimos a un podio y les hicimos entrega de una medalla (de dinosaurios) a cada uno. David estaba emocionadito, para no variar, aunque Miguel no se quedó atrás, al ganar no una sino dos medallas, como ganador absoluto del último juego, "Batalla de triceratops". Consistía en una "lucha" con la nariz, en el que cada niño llevaba pegado un trozo de celo en la punta. Al darse contra la nariz de otro, uno de los dos se queda con el celo del otro, y así va derrotando a los demás, hasta que uno (Miguel en este caso) consigue quedarse con el pedacito de celo de todos los demás. (Me explico fatal, pero es super divertido!!! Este se lo debemos a los chicos de Tarabelos, cómo nos divertimos cuando estuvisteis aquí!! Biquiños!!).
Nos lo pasamos genial, acabamos todos agotados, pero mereció la pena.
Habrá que ir pensando en ideas nuevas, porque Miguel empieza a planificar el suyo... para febrero!!!
ais que guayyyyyyyyyyyyy . me alegro que lo pasarais tan bien!
ResponderEliminarGenial!!! Cuando quieras ven aquí a organizar cumples también!
ResponderEliminarMe encanta. Vaya ideas!!!seguro que se lo pasaron bomba. Un saludo. Pilar
ResponderEliminarQué inventiva!, chulísimo!, se ve que lo pasateis y pasaron Genial. Ahora, a por el otro :).
ResponderEliminarBesotes.