Repasando

Una semana ya de vuelta en casita pero seguimos en modo vacacioneo, lo que significa entre otras cosas que nos levantamos a las mil, podemos trasnochar, ponernos al día con las pelis que nos perdimos este año (y los anteriores...), y otros placeres que seguro echaremos de menos en cuanto vuelva la rutina escolar...

Tratando de poner algo de orden en el disco duro, rescato algunas fotos de nuestros días en Marín, mientras Mateo disfrutaba de su campamento. A falta de hermano mayor, los peques disfrutaron del primo Samu, igualmente dispuesto a cualquier trastada que se les ocurra a estos dos...

Por su parte, la princesita Noa se hacía la tímida, aunque la cara de pilla no se la quita nadie...

Pero con lo que le gusta posar, enseguida se mostraba de lo más dispuesta ("otra foto, tía Rebe!").

Con los míos lo noto menos porque los veo a diario, pero con mis sobrinos me llevo un shock cada vez que vamos. ¿Cómo pueden haber crecido tanto en tan poco tiempo??

Toda una chica mayor, que en nada ya los está gobernando a los otros 4... que lo veo venir!

Por lo de pronto, hemos empezado a concienciarnos y hemos cambiado la habitual invasión de ropa para planchar, por libros y material escolar. Miguel entra en éxtasis cada vez que ve su mochila nueva y todos esos libros de niños mayor, y cuenta los días para pasar a ser "un chico de Primaria". "¡Estoy muy emocionado!", me dice a cada rato. Ojalá no se le pase la emoción en cuanto empiecen a ponerle deberes para casa... :S

Pero no adelantemos acontecimientos, aún nos quedan unos días para seguir disfrutando de no hacer nada en especial y de que, precisamente por eso,  todo sea especial! :-)