Ya puestos a recuperar ritmo de fotos, después de la sesión matutina en casa, por la tarde tocó paseo bajo la lluvia. Pero cuatro gotitas de nada no me iban a quitar las renovadas ganas de fotografiar...
Allá nos fuimos, bien equipados con botas de agua y chubasqueros, a pasear por el embalse. Y que no falten las pompas nunca!!
Con el viento que hacía no era necesario ni soplar, lo cual era algo frustrante para David...
Mientras Mateo y Miguel se dedicaron a su deporte favorito, tirar piedras, meterse en el agua hasta donde las botas lo permitían, coger palos... Disfrutando, vaya!
Nada como un paseito para cargar pilas...
Y entre el finde-relax y la perspectiva de vacaciones a la vista... ¡Felicísimo lunes!! (hasta que llegue a casa y me toque ponerme en modo maleteo... ).
que guapos!! y que fotos más bonitas!!!
ResponderEliminarUn abrazo, Rebeca!