Se necesita bien poco. Este proyecto de los #100happydays en el que nos hemos metido unos cuantos lo demuestra. A poco que te fijes, hay cientos de cosas a tu alrededor por las que estar agradecido y sentirte feliz. No tienen que ser grandes cosas. Puede ser ese trozo de chocolate que te endulza el final de un día duro, ese achuchón que te dan de repente y casi te dejan sin respiración, ese baño calentito extra largo y con mucha espuma...
... o salir de copas con tus compañeros un jueves por la noche...
... tener un viernes libre porque es el día del maestro...
... hacer una escapadita en coche con toda la familia...
... visitar lugares que hace 22 años no visitabas...
... disfrutar el paisaje, los monumentos, la comida, el cambio de aires...
... acurrucarse en el sofá y tener tiempo para ver una peli (de la tele!!! con sus anuncios y todo!!!)...
... refrescar los doloridos pies con agua fría después de caminar sin parar durante horas...
... ver a tus hijos disfrutar correteando de aquí para allá entre piedras e historia...
... o una simple flor que te regalan porque sí.
Tantas y tantas cosas!!! En Instagram ya voy por mi día 22/100 happydays, y de momento ha sido fácil. Y no es porque sea especialmente afortunada (que lo soy!), es que estoy aprendiendo a fijarme en las cosas, y a valorarlas más.
Happy week!!
PD Y como todos los miércoles, no os perdáis a los súper happy Litel Pipol una semana más!
Qué bien que sigas disfrutando de cada pequeña cosa!! Yo te piso los talones (Y gracias!) ya voy por la 18...aunque 100 me siguen pareciendo muchísimas! jajaja
ResponderEliminarSigue así, un besico!