De juguetes y rivalidades

Pocos días son tan especiales para los niños como el día de Reyes. A Mateo le ilusiona muchísimo porque en la carta que les escribe les hace un dibujo con todo detalle de lo que quiere... no sea que se confundan Sus Majestades! Y cuando llega el día y abre el regalo, lo primero que dice es "Igualito al que les dibujé!!".

Los peques son otra cosa. A veces les hace más ilusión la caja que el juguete en sí. O la piruleta que viene pegada al paquete!!

Cualquier novedad es interesante, y si es un juguete, más aún. Y mucho más si el juguete no es suyo, sino de otro niño. Vamos, se convierte instantáneamente en el "único" del mundo.

Y empieza la batalla campal por el juguete... Y se miran con cara de "Como me lo cojas te vas a enterar". Claro que se les pasa enseguida y luego se quieren con locura!

Primero fue el bebé, este adorable muñequito que le trajeron a Noa. 

Y ella, como buena mamá, defendiéndolo de cualquier extraño...

"Ni se te ocurra, David, que te he visto!! Trae ahora mismo!!"

  

Pero es que no sólo está David. También está Marcos, otro peque (hijo de mi prima) al que el muñequito también le parece interesante... Y Noa mirándole con cara de "No estarás pensando en cogerlo, ¿verdad? Mira este otro muñequito que lindo, es un perrito!! Cógelo!"

Menos mal que Marcos se conforma pronto, y además allí está David para consolarlo con un abrazo de los suyos... 

Y luego, el futbolín. Esa cosa tan interesante a la que están jugando los primos mayores (Samu, Mateo y Miguel) gritando como locos "goooool" cada dos por tres... 

"Tiene buena pinta... Hmmmmm, Y a esto, ¿como se juega?".

A lo cual recibió alguna respuesta poco agradable de los mayores...  La vida es muy dura cuando eres un bebé...

Pero como suele ocurrir, pasa la novedad y se aburren del juguete nuevo... y allí quedó el futbolín abandonado... pero sólo 5 minutos.

Fue una mañana de Reyes de lo más animada! 

Como tantos otros momentos... si es que consigo ponerme al día!!